El evento en Río busca el consenso para
aplicar impuestos a los ultrarricos, con el fin de impulsar la acción
climática y aliviar la pobreza.
La 19ª Cumbre de Líderes del G20 está prevista para los
días 18 y 19 de noviembre de 2024, en Río de Janeiro, integrada por los
líderes de los 19 países miembros, más la Unión Africana y la Unión
Europea.
Con el eslogan «Construyendo un mundo justo y un planeta sostenible», Brasil centrará la cumbre en tres ejes: eliminar el hambre, la reforma de los organismos internacionales (ONU, FMI, Banco Mundial, OMC…) y la transición energética. Además, en la Cumbre se presentará un plan para aplicar
impuestos a los multimillonarios del mundo, con un impuesto anual del 2%
sobre el patrimonio neto total de los superricos, en aras de abordar las crecientes desigualdades globales, entre los países de bajos ingresos muy endeudados, muchos en África.
A mi se me hace una gran idea aunque no creo que pase otra vez como ha pasado desde lo 1990 y supongo que hasta antes también. Es parecido a la tasa Tobin*, una tasa que reduce la volatilidad y por lo tanto beneficia tanto a inversionistas como a pa+ises.
* La tasa Tobin es un impuesto indirecto que grava las transacciones financieras, como la compra y venta de activos financieros. Se
creó en 1971 por el economista estadounidense James Tobin para reducir
la volatilidad de los mercados financieros y recaudar fondos para
políticas públicas.
En su primera intervención en la cumbre del G20, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo
propuso establecer un fondo para destinar “uno por ciento del gasto militar de nuestros países
para llevar a cabo el programa de reforestación más grande de la historia”, con Sembrando
Vida. “Significa liberar unos 24 mil millones de dólares al año (12 veces lo que ya destina México)
para apoyar a 6 millones de sembradores de árboles que reforestarán 15 millones de hectáreas,
algo así como 4 veces la superficie de Dinamarca, toda la de Guatemala, Belice y el Salvador
juntos, o 30 por ciento a la de Suecia”.
Se me hace congruente con ella y su política y también para con los fines que buscamos. Si
queremos vivir sin violencia en un periodo basta con darles un plato de sopas que sirve como lo
vimos con el Peje y en parte con el PRI antes de la crisis de la deuda latinoamericana o década
perdida. Pero si queremos que se repita constantemente programas sociales son undimensionales
pero si logramos que la gente se enfoque en algo repetitivo como la reforestación y la biodiversidad
logramos crear un nuevo ciclo repitivo que no sólo nos beneficia sino a toda la pachamama.
Programa de reforestación en el G20
Yo no lo veo mal, me agrada aunque creo que lo expresaron con término erróneos ya que a mi
parecer lo debería haber llamado una eco-tasa tipo Tobin como describí arriba pero eso es lo de menos. Una buena idea es una
buena idea aunque usen términos poco precisos. Pero eso es lo de menos.
